viernes, 1 de febrero de 2008

Pan.

El humilde pan ha sido, y todavía es, básico en nuestra alimentación. El trigo fue siempre nuestro cereal más apreciado y su abundancia o escasez hacía que los pueblos tuvieran un mediano pasar o sufrieran hambrunas.

Hoy voy a escribir cómo hago yo pan. Mi abuela decía que "el pan es por su dulzor", o sea, que no debe saber a nada, pero tiene que acompañar con todo.

- 500 gramos de harina. Puedes usar harina integral, normal, o mezclar ambas como hago yo.
- 300 mililitros de agua.
- un chorrito de aceite de oliva (una cucharada aproximadamente)
- 10 gramos de levadura.

Preparación

1º. Calentamos el agua hasta unos 40º centígrados (templada).

2º. En un recipiente colocamos la levadura, el chorrito de aceite y el agua.

3º. Mezclamos con la mano hasta que se diluya la levadura.

4º. Añadimos la harina y amasamos en el recipiente hasta que la masa tenga una consistencia adecuada. Es posible que tengamos que añadir un poquito de harina o de agua, dependiendo de que la masa quede muy pegajosa o seca.

5º. Cuando la consistencia de la masa sea correcta (no debe pegarse demasiado al recipiente ni a las manos) se saca del recipiente y se pone sobre una tabla o mesa, donde se trabaja durante unos minutos (a puñetazos, estiramientos, reagrupamientos...).

6º. Ahora cortamos la masa en varios pedazos, tantos como piezas de pan queramos hacer.

7º. Cada pieza de pan la volvemos a trabajar un poco y terminamos dándole la forma que deseemos (barra más o menos larga, rollo, hogaza...)

8º. Dejamos las piezas sobre una fuente de horno o lata (sería conveniente que hubiéramos humedecido con aceite la base de la fuente para que no se peguen las piezas)

9º. El pan debe permanecer un tiempo en reposo, para que fermente, antes de introducirse en el horno. El tiempo aproximado (dependiendo de la cantidad de levadura, calor ambiental...) oscila entre 45 y 75 minutos. Veremos que las piezas de pan han ganado bastante volumen (como 2 veces el inicial) e incluso se ven estrías.

10º. Con un cuchillo afilado (o cuchilla de afeitar) hacemos unos cortes a las piezas de pan y las introducimos en el horno (previamente calentado durante 15 minutos) a la máxima potencia durante un tiempo aproximado de 30 minutos, según gustos. Hay hornos que lo consiguen hacer en 20 y otros necesitan 40.


Un último consejo: si la cosa saliera mal y se pegara la masa a las manos o algo parecido (a mí a veces me ha pasado), se deja hecha una bola sobre la fuente el tiempo de reposo indicado antes y nos saldría una fantástica hogaza.

Parece toda una aventura, pero es muy fácil.



Saludos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Te agradezco mucho que visites mi blog, y mucho más que me dejes tus opiniones sobre los diferentes temas.